Este mes, como parte de nuestra iniciativa de visibilizar nuestras asociaciones sociales, Emma Cortés, responsable del Departamento de Seguros para Asociaciones de Urquía & Bas, tuvo el placer de conocer a la Asociación de Familiares y Enfermos de Alzheimer de Lleida (AFALL). Durante la visita, Joana Espuga y Montse Guiu nos ofrecieron un recorrido por la historia, los retos y los proyectos de esta entidad, que desde hace más de 25 años brinda apoyo a personas afectadas por el Alzheimer y a sus familiares.
Durante la conversación, hablamos sobre el pasado, presente y futuro de la asociación, repasando sus primeros años, cuando la falta de información y la ausencia de medidas de prevención, que hoy en día sí existen, dificultaban el tratamiento y las terapias. Con el paso del tiempo y los avances científicos en torno a esta enfermedad, se ha logrado mejorar los tratamientos para ralentizar su progresión. Aunque aún no se ha encontrado una cura definitiva, desde AFALL mantienen la esperanza de que los descubrimientos recientes y futuros puedan ofrecer nuevas soluciones en los próximos años.
También hemos hablado de los voluntarios, y se ha destacado la colaboración de AFALL con centros formativos de Lleida. Alumnos de Psicología y Trabajo Social realizan sus prácticas en la asociación, proporcionando no solo un valioso refuerzo al equipo, sino también adquiriendo una experiencia crucial para su formación. Una colaboración que permite que los jóvenes se formen en un entorno real, mientras contribuyen con sus conocimientos al bienestar de los usuarios.
En cuanto a la financiación, Joana y Montse señalaron que, aunque la asociación trabaja con una planificación cuidadosa para asegurar la continuidad de sus servicios, desde la pandemia han experimentado retrasos en los pagos de las subvenciones por parte de las administraciones públicas. A pesar de estos obstáculos, AFALL sigue adelante con su labor, gestionando sus recursos de manera prudente para mantener sus actividades en funcionamiento.
Durante nuestra conversación, también salió a la luz un tema sensible: el estigma social que todavía rodea al Alzheimer. A muchas personas no solo les cuesta asumir el diagnóstico, sino que también enfrentan dificultades por el «qué dirán». De hecho, algunos usuarios han dejado de asistir a los talleres de la asociación debido a la vergüenza que les genera el hecho de que el edificio esté rotulado con la palabra “Alzheimer”. Este estigma social hace que algunos enfermos eviten buscar ayuda en fases tempranas, lo que AFALL intenta combatir proporcionando un entorno acogedor y normalizando la enfermedad dentro de la comunidad.
A pesar de estas dificultades, la asociación no deja de mirar al futuro.
Nuestra visita a AFALL nos permitió conocer de cerca la gran labor que realizan y reflexionar sobre la importancia de eliminar barreras y prejuicios en torno a las enfermedades neurodegenerativas. En Urquía & Bas, renovamos nuestro compromiso de apoyar iniciativas que mejoran la calidad de vida de las personas, valorando profundamente el trabajo de asociaciones como AFALL, que transforman el dolor en solidaridad y esperanza.
Podéis encontrar más información en su web